El pasado viernes un niño de tres años recibió un impacto de bala en su cabeza, en la comuna de Quilpué, quinta Región. En una primera instancia, la madre del menor declaró que había sido una bala loca disparada en una plaza, versión que, tras las indagatorias policiales, fue desechada.
Por lo anterior, y debido a desviar las pericias policiales a lugares que no correspondía, la Fiscalía formalizó a la mujer por el delito de obstrucción a la justicia.
Según consigna ADN, el fiscal Walter Wenzel explicó que «lo que ella realiza es una obstrucción a la investigación, por haber falseado datos, tanto el Ministerio Público como la Brigada de Homicidios, que impidieron la realización de diligencias útiles para esclarecer el hecho y para determinar quienes son los partícipes del mismo”, agregando que «esos mismos antecedentes falsos demoraron diligencias. La Brigada de Homicidios estuvo recopilando antecedentes, cámaras de seguridad, que resultaron ser falsos».
La madre del menor quedó con arraigo nacional y firma mensual.
